Al Huesca se le han atragantado dos operaciones en las últimas horas. Ya sea por negativa del club o del jugador, la afición oscense pudo tocar con la punta de los dedos dos fichajes que no terminaron de llegar.
El caso de Álvaro García parecía cerrado con el anuncio oficial de ambos clubes. El Huesca adquirió el 50% de los derechos del jugador gaditano, que parecía prácticamente fichado. Minutos más tarde, el delantero no dudó en sacar un comunicado en el que negó tajantemente que fuera a jugar la próxima temporada en El Alcoraz.
Los aragoneses, sabedores de la dificultad de convencer al jugador, podrían estar buscando ya, según informa 'AS', otro extremo con las mismas características. Cuando aún no habían digerido la noticia del cadista, salió a la luz la negociación a dos bandas por Ghoddos.
El mundialista con Irán es objetivo prioritario del club aragonés. El Östersunds envió la documentación, pertinente pero el jugador y el propio club podrían estar negociando a su vez con el Rennes. Todo está por aclararse aún. El Alcoraz se ha convertido en la casa de los líos.