Todo comenzó con la expulsión de Piatti en el minuto 60. El mediapunta fue expulsado con una roja directa y la plantilla consideró que la acción fue castigada de manera exagerada.
Mientras el trencilla señalaba la infracción, la plantilla del Espanyol le protestó su decisión. Leo Baptistao le recriminó la tarjeta al colegiado tocándole el pecho con el dedo, lo que provocó que el árbitro decidiera suspender el partido.
El tiempo muerto duró 10 minutos y tras él, se reanudó sin ninguna incidencia. El club 'perico' ironizó en Twitter con un "Se queda". Este mensaje fue publicado en alusión al tweet de Piqué hacia Neymar.
Se queda #RCDE pic.twitter.com/aUp6rTkZLH
— RCD Espanyol (@RCDEspanyol) 2 de agosto de 2017