Eso sí, la cesión que le mandó el defensa no es la mejor, todo hay que decirlo. Pero el checo, que ha protagonizado varias cantadas en las últimas semanas, lo terminó de arreglar.
El balón le llegó al área centrado y Cech, que vio la aproximación de un par de rivales, intentó despejar con la zurda. El resultado, poco menos que nefasto. Y Ayew, tan agradecido.
30 de enero de 2018