El Arsenal sigue apurando sus opciones de alcanzar una de las plazas que permitan al conjunto 'gunner' disputar el año que viene alguna de las competiciones europeas. La victoria de este domingo ante el West Brom tiene dos consecuencias: por un lado, le mantiene vivo en esta lucha y por otro, el descenso al Championship de los de Sam Allardyce.
Mikel Arteta optó por darle la titularidad a Smith-Rowe en detrimento de Martin Odegaard y la jugada le salió redonda, pues el joven centrocampista logró anotar el 1-0 en el minuto 29 tras una asistencia de Saka.
En este momento, el conjunto visitante ya se encontraba hundido, consciente de cuál era su futuro inmediato. El Arsenal se dio cuenta de ello y tan solo seis minutos más tarde Pépé marcó el segundo gol del encuentro tras un imparable trallazo.
Los 'baggies' salieron a los segundos 45 minutos con otro aire, esperanzados por lograr la heroica. Así, Matheus Pereira recortó distancias gracias a un tanto espectacular, con una gran conducción prácticamente desde el centro del campo.
Los últimos minutos fueron bastante tensos y repletos de incertidumbre, conscientes ambas escuadras de lo que se jugaban. No obstante, Willian sentenció el choque con un gran lanzamiento de falta cuando el tiempo añadido estaba ya a la vuelta de la esquina.
Con este resultado, los londinenses mantienen la esperanza de alcanzar la sexta o séptima plaza, que les daría acceso participar en Europa el curso que viene; mientras, el West Brom certificó su descenso matemático una campaña después de ascender.