El Athletic despidió a Txetxu Rojo: "Se va un mito"

El Athletic Club ha glosado la figura de Txetxu Rojo tras conocerse el fallecimiento del que es una de las "más grandes leyendas rojiblancas" este viernes, en la localidad vizcaína de Leioa, "acompañado de sus familiares" a los 75 años de edad.

"En un club plagado de leyendas, se nos va una de las más grandes, un auténtico mito rojiblanco, con una trayectoria fabulosa en la centenaria historia del Athletic. Una zurda de seda, puro ingenio en el pase y centro al área… Un '11' inolvidable, un One Club Man (jugador de un solo club)", dimensiona el ídolo de muchos de los aficionados que le vieron jugar durante sus 17 temporadas en el primer equipo rojiblanco. Entre 1967 y 1982.

Pero, añade el Athletic, "la huella que Txetxu Rojo deja en el Athletic Club es inmensa y va mucho más allá del fútbol". "En torno a su pierna izquierda prodigiosa, su talento creativo y su clase deslumbrante se erigió un ídolo que marcó toda una época y cuyo eco perdura inalterable entre los athleticzales", continúa el club vasco.

Y destaca que "los relatos sobre la elegancia suprema y la técnica portentosa de Rojo I en la banda izquierda se han transmitido entre generaciones de manera espontánea, como perduran en la memoria colectiva el recuerdo de los seres queridos y los grandes mitos".

José Francisco Txetxu Rojo Arroita (Bilbao, 28-01-1947) es el segundo futbolista con más partidos disputados en la historia del Athletic (541), el que más de un jugador de campo, y cuenta en su palmarés con dos títulos de Copa, los de las finales ganadas al Elche y al Castellón en 1969 y 1973.

Aunque como quien le precede en esa histórica lista, el también legendario José Angel 'El Chopo' Iribar (614), que cuenta asimismo con esas dos Copas en su palmarés como rojiblanco -si bien le añade la Eurocopa de 1964 con España-, Rojo I está por encima de los título conseguidos.

Su larga trayectoria, 17 temporadas, su impacto en los aficionados y el hecho de que el homenaje que se le tributó en San Mamés una vez abandonado el fútbol como jugador fuese ante Inglaterra, una selección venerada durante décadas en Bilbao, le sitúan entre los grandes.

Y eso que se retiró justo cuando el Athletic, de la mano de su ex compañero Javier Clemente, iba a lograr en los años posteriores los recordados títulos de los años 80.

De Rojo, más allá de los números, que se valoran más con el tiempo, lo que queda es su planta, su conducción del balón con una zurda de seda y sus impecable toque de balón. Oro puro en los centros al área para cabeceadores de la entidad de otros grandes rojiblanco, Fidel Uriarte, el 'pichichi' Carlos Ruiz o el gran capitán de los títulos Danel Ruiz-Bazán, que los aprovecharon.

No tan dilatada fue una trayectoria internacional que se quedó en 18 partidos, inferior a la esperada a un figura tan destacada.

Entre el legado de Rojo como jugador está la épica campaña de 1976-1977, cuando el Athletic dirigido por Koldo Agirre llegó a las finales de Copa y de la UEFA y las dos las perdió por poco. La de la UEFA frente a la Juventus de Turín por el mayor valor de los goles marcados fuera de casa (1-0 en Italia y 2-1 en San Mamés) y la Copa contra el Betis por penaltis en una tanda larguísima (2-2 al final de la prórroga).

Como no podía ser menos para alguien de su conocimiento del juego, Rojo fue entrenador. No triunfó en el Athletic, al que dirigió en dos etapas y donde tuvo a Ernesto Valverde de ayudante, pero fue muy querido en el Celta de Vigo y tiene el hito de llegar con el Zaragoza a la última jornada de Liga con opciones matemáticas de ser campeón de Liga.

El Athletic considera que "los datos y las palabras se quedan cortos para construir cualquier semblanza sobre Txetxu Rojo, ya que los que le vieron jugar "durante 17 temporadas de su juego único en la banda izquierda gozaron de regates asombrosos, pases quirúrgicos e inesperados, controles exquisitos y goles preciosos".

Pero, sobre todo, "recuerdan el aura de un futbolista irrepetible, un artista, un creador de belleza, acaso desprovisto de la garra de otros mitos rojiblancos, pero poseedor de un genuino y enorme corazón de león".

"Aunque el corazón de Txetxu haya dejado de latir en su cuerpo mortal, seguirá latiendo por siempre en los corazones de la afición. Goian Bego, Rojo I", finaliza la estampa de una de sus más indiscutibles figuras el Athletic, que avanza que "en las próximas horas" comunicará "cómo será la despedida en honor" de "un mito rojiblanco, un '11' inolvidable".