Las redes sociales del Atlético de Madrid son de natural neutras. Pocas veces el club alza la voz ante lo que sus propios seguidores catalogan como agravios inaceptables, pero a veces ocurre, aunque sea con cuatro años de retraso.
Todo comenzó en la mañana de este jueves, cuando los principales medios del país se hicieron eco de unas declaraciones de Mark Clattenburg, el ex colegiado que se encargó de arbitrar la final de 2016 entre Atleti y Madrid en Milán.
En ellas, el inglés reconoció haberse equivocado al dar por bueno el 1-0 del Madrid, un testarazo que Ramos realizó en posición antirreglamentaria. "El gol fue en fuera de juego por muy poco. Nos dimos cuenta en el descanso. Era una acción difícil y mi asistente falló", dijo, al 'Daily Mail'.
Esas declaraciones han causado un gran revuelo en las redes sociales. Y a media tarde ocurrió lo que pocos esperaban que ocurriese: desde la cuenta oficial de Twitter del Atlético de Madrid se publicó un mensaje al respecto.
Fue simple: un emoji de dudar, y capturas de la noticia en diversos medios. Fue como una bomba. Como cuando en las películas lanzan un mechero encendido a un charco de gasolina. Era el cóctel perfecto, y Twitter ardió.
May 14, 2020
El Atleti no acostumbra a hacer esta clase de acciones, aunque esta temporada, gracias y por culpa del VAR, ya se le había visto alimentar la polémica con mensajes similares. A fin de cuentas, lo hacen todos, de un modo u otro. Y, como dicen algunos, más vale tarde que nunca, aunque sin duda hubiera sido mejor haberlo hecho hace cuatro años.