Una cesión al guardameta del conjunto local acabó con un despeje del mismo cuando el balón ya había salido por la línea de fondo. Sin embargo, Néstor Pitana, el colegiado del choque, no vio nada y la jugada siguió.
El esférico llegó a un futbolista de Chacarita que probó fortuna sin pensárselo dos veces. Aun así, su disparo golpeó en el brazo de Desábato, que aunque lo tenía bien pegado al cuerpo el árbitro señaló la pena máxima.
Mauro Matos fue el encargado de materializar el penalti para poner por delante a Chacarita Juniors. De esta manera, el delantero del conjunto visitante asestó un primer golpe a su rival desde los 11 metros.
10 de abril de 2018