Estaba llamado a ser un partidazo y el Barcelona siguió el guion con el papel del malo. El Atlético pisó el estadio Johan Cruyff con la etiqueta de líder y tropezó con un ejército con la puntería afinadísima.
La pizarra de Lluís Cortés funcionó y la pegada azulgrana hizo acto de presencia. Solo habían pasado dos minutos cuando Sampedro abrió el marcador con un gol que se sintió como un alivio, pero que terminó siendo insignificante.
Tounkara no tuvo su mejor tarde. Cometió poco después un penalti con el que despertó a un gigante que olió sangre. Jenni Hermoso, ex jugadora rojiblanca, engañó a Lola Gallardo con un disparo de calidad a la izquierda. Fue ahí cuando el Barça arrasó con todo a su paso.
No había pasado ni media hora cuando ya se produjo la remontada. Oshoala estaba en modo imparable, el balón golpeó en el larguero y Mariona recibió el premio para que, con una volea, firmara la remontada.
Laia confirmó la desconexión rojiblanca. La mala suerte se cebó con la defensa, que hizo un gol en propia puerta sin quererlo, pero todavía quedaba un golpe más antes del descanso. Oshoala amagó, engañó a Lola y puso la guinda a lo que fue un tiroteo en la primera parte.
El quinto no tardó en llegar, otra vez de Oshoala. Se lució la delantera del Barcelona con una bicicleta y un remate ajustado. El Atlético fue un saco de boxeo en el que descargar toda la furia.
Patri Guijarro llevó el cuero otra vez al larguero y Lluís Cortés empezó el carrusel de cambios, mientras que Tounkara, presa de la rabia, vio la roja por una entrada a destiempo, dejando al Atlético con una menos.
Meseguer le dio el set al Barcelona y con la confirmación del cambio de líder en la Liga Iberdrola se acabó una batalla en la que el Atlético se hizo pequeño.