Cuando los focos y los titulares apuntan a Griezmann y a Neymar, pocos elevan el debate a las salidas que tendrá que hacer frente el conjunto azulgrana para evitar el 'overbooking'.
SI bien las llegadas de ambos astros -está aún por ver que lleguen los dos- elevarían el nivel de la plantilla a picos muy altos, su irrupción en el vestuario podría suponer un terremoto sobre las ambiciones de varios futbolistas.
Coutinho, que no termina de adaptarse al estilo azulgrana, podría salir, siendo utilizado por la directiva 'culé' para abaratar el coste de Neymar.
El nombre de Dembélé está rodeado por la misma duda. Si bien el Barça cuenta con él, el jugador francés cuenta con un buen cartel en Europa, sobre todo en Francia, su país natal, donde también podría ser usado como moneda de cambio.
Sin embargo, pocos hablan de Malcom. El ex del Girondins llegó a la Ciudad Condal después de una gran inversión de 41 millones que rompió un preacuerdo del jugador con la Roma. Pero el atacante apenas ha contado para Valverde.
Aunque parece que el club parece no querer venderlo en primera instancia, sí que estaría buscando una cesión en un equipo de primer nivel europeo en el que pueda nutrirse de minutos.
Según 'Daily Mirror', esta entidad podría ser el Arsenal, equipo con el que el Barcelona ya se habría puesto de acuerdo con el objetivo de ofrecerle al futbolista.
Se trata de un primer acercamiento pero, en el caso de concretarse, su salida podría pronosticar la llegada de varios jugadores de ataque. Es decir, el Barça necesitaría hacer hueco, pero sólo si llegan tanto Griezmann como Neymar, dando lugar a un atasco en las posiciones altas del ataque 'blaugrana'.