Sin embargo, el Benfica puede verse obligado a ceder y vender al futbolista a un precio menor al deseado. Medio pase del futbolista pertenece a un fondo de inversión, y el Benfica tiene un acuerdo con éste por el cuál toda oferta superior a los cuatro millones debiera ser aceptada.
La Lazio ofreció recientemente ocho millones, el doble del supuesto mínimo, pero el presidente del Benfica sigue enrocado por el momento en sus doce millones, el triple. Esta situación complica las negociaciones para el conjunto lisboeta, que quizá se vea abocado a vender a su central a un precio menor al deseado.