El Santiago Bernabéu fue un clamor con Luka Modric, que saltó al verde en la previa del Madrid-Leganés junto a Keylor Navas y Sergio Ramos. Los tres futbolistas blancos ofrecieron al público los premios conseguidos en la última gala de la UEFA.
Fue un bonito prolegómento para un encuentro que concluyó con una aplastante victoria del Madrid. Antes, el Bernabéu se rindió a los pies de sus jugadores, sobre todo a los de Luka Modric.
El croata, coronado hace unos días como el mejor jugador de Europa en el pasado curso, es uno de los candidatos a ganar el próximo Balón de Oro. Peleará con Cristiano, su ex compañero, y posiblemente con Leo Messi y Antoine Griezmann.
La respuesta del coliseo blanco fue más que clara. "Balón de Oro, Lukita Balón de Oro", repitió en varias ocasiones los asistentes al duelo ante el Leganés. Cristiano ya es historia y Modric, al menos en los corazones de los aficionados, ha tomado el testigo.