A pesar de tener 38 años, Bravo parece predispuesto a continuar en el fútbol de élite. El chileno no contempla la retirada, su idea no es otra que seguir ligado a la disciplina del Betis.
El cuadro verdiblanco también quiere que continúe, pero hay una serie de discrepancias, tal y como apunta 'Canal Sur'. Y las mismas radican en la duración del nuevo contrato.
La citada fuente señala que el equipo andaluz le ofrece un año más otro opcional, mientras que el cancerbero pide dos años. Hay deseo de seguir, pero primero deben resolver dicha situación.