La Juventus fue derrotada por el Tottenham en la ICC tras remontar los ingleses por mediación de un golazo desde el centro del campo de Harry Kane, pero hubo buenas sensaciones en la escuadra italiana y no solo dentro del terreno de juego.
Cristiano jugó parte del partido y marcó un gol, pero fue sustituido y se unió al resto de sus compañeros en la banca para seguirlo como espectadores. Lo que no se esperaban es que apareciera un niño con la intención de conocerles.
Los futbolistas no le echaron ni avisaron a seguridad, sino que le invitaron a ver el encuentro con ellos. El portugués, de hecho, charló con él durante unos instantes que probablemente nunca olvide el joven fan.