Jeison Murillo desembarcó en el Celta a principios de 2020. Tenía que regresar a la Sampdoria en verano de ese mismo año, pero ambas partes llegaron a un acuerdo y prorrogaron su cesión.
Este mes de junio, finaliza ese segundo préstamo de la Sampdoria. Y temen en el Celta que no vaya a haber otro más.
Según 'La Voz de Galicia', hay cierto pesimismo en cuanto a su continuidad. Porque el Celta solo contemplaría que siga si es en las mismas condiciones, o sea, cedido.
Cuenta este medio que las cifras que la Sampdoria pretendería sacar por su venta ni se las plantea el Celta. Habrá que ver qué ocurre este verano.