Según publicó el 'Chronicle', el joven, aún con ficha del filial, tiene uno de los sueldos más bajos que puede registrar la Premier, donde el poder adquisitivo de los jugadores es de sobras conocido.
Concretamente, el salario que percibe el centrocampista es de unas 850 libras a la semana. Traducido en euros, poco menos de mil. Una cantidad irrisoria hasta en los clubes de la tercera categoría en Inglaterra.
El mediocampista del Newcastle firmó su primer contrato profesional el pasado verano de 2018 y al final de temporada acaba su vinculación en St James' Park.
Pero parece que esa realidad cambiará dentro de poco una vez que su tanto ha tenido bastante resonancia. Ya per sé estaba en el escaparate su titularidad haciendo pareja en el doble pivote junto a su hermano Sean David.
Curiosamente, por este último el Newcastle tuvo que ponerse firme para evitar su fuga meses atrás. En Inglaterra se llegó a hablar de que un club ofrecería hasta 50 millones por él. ¿Quién? Oh, sorpresa: el Manchester United.