Harry Kane se quedó en su Tottenham y no cruzó la puerta de salida en el pasado mercado de fichajes, lo que no quita que en 2022 pueda hacer las maletas, sobre todo si no renueva.
Aun teniendo un contrato hasta el 2024, las aguas sigue revueltas porque no hay acuerdo entre Daniel Levy, el presidente del club, y el delantero. Kane quiere incluir una cláusula de rescisión y el mandatario obviamente no va a pasar por ahí.
De este modo, el tira y afloja no ha hecho más que aumentar los rumores y los pretendientes de Kane, como es el caso del Manchester City de Pep Guardiola.
Según la 'ESPN', el club del Etihad Stadium sigue de cerca la situación que vive el delantero y no lo ha tachado de su lista de futuribles para el 2022, año e el que podrían echar de nuevo sus redes sobre él.
En cualquier caso, Kane ha arrancado del curso con buena nota, pues suma dos goles en cinco partidos, cuatro de ellos como titular.