Ya están a la venta las entradas para ver la segunda parte del duelo copero entre el Real Madrid y el Barcelona. Tras el 1-1 de la ida, las espadas están por todo lo alto. Además, suena casi a título anticipado el partido; parece tener más valor evitar que el eterno enemigo se meta en la final que el pase propio.
Y eso genera gran expectación, de ahí que los dirigentes prevean una entrada memorable. Por supuesto, harán caja con ello.
La entrada más barata, ubicada en el cuarto anfiteatro de cualquiera de los dos fondos, costará 75 euros. Es lo más asequible. Es decir, 30 euros más cara de lo que suele valer en un partido de Liga.
En Tribuna, donde se dan los precios más inaccesibles, la cosa se multiplica hasta los 265 euros, lo cual convierte el choque en una cita de élite.
Por no hablar ya de las entradas VIP, que oscilan entre los 400 (Salas Copa de Europa y Veteranos) y los 800 euros (Sala Balón de Oro), con zonas intermedias de 550 (Sala Museo) y 600 (Salas Real y Glasgow).
Al menos, los socios se verán beneficiados de una reducción aprovechando su condición. Por ejemplo, pagarían 79 euros menos por la localidad más cara.
La zona acotada para los seguidores visitantes, el cuarto anfiteatro del Fondo Norte, tiene un precio único de 85 euros.