El Cluj gana la Liga Rumana más surrealista de la historia

El CFR Cluj ha tenido que sudar la gota gorda para alzarse con su tercera Liga Rumana consecutiva. Después de sufrir una epidemia de positivos de COVID-19, la insistencia de la UEFA en acabar antes de esta medianoche y un cambio de reglamento, finalmente el conjunto dirigido por Dan Petrescu ha podido alzarse con el título, con el técnico aislado.
Comenzó a complicarse el título cuando el Cluj empezó a anunciar positivos en la plantilla. Pasó de 13 a 26, pero un día después todos ellos habían dado negativo en las pruebas. Pese a todo, el campeonato siguió.
La segunda piedra en el camino vino con la insistencia de la UEFA de saber el ganador de la Liga, y su posterior pase a la fase previa de Champions, antes de que finalizase este lunes.
Ello provocó que el encuentro de la última jornada entre el CSU Craiova y el CFR Cluj se disputase este mismo lunes. Solo dos puntos separaban a ambos conjuntos antes del pitido inicial.
Pero el surrealismo llegó con la decisión de la competición de cambiar el reglamento a solo tres horas para el inicio. Pasó de ser un partido más a una final, con prórroga y penaltis en caso de empate.
El Cluj, que iba por delante en la clasificación, vio cómo pasaba de que le servía el empate a tener que ganar por obligación si quería hacerse con la Liga Rumana.
Después de un susto con el gol de Nistor para el Craiova, el Cluj se puso el mono de trabajo y remontó el encuentro y la Liga con los tantos de Paulo Vinicius, Boli y Deac, este de penalti.
Finalmente, y tras una temporada de locura con un final surrealista, el Cluj se ha alzado con su tercera Liga Rumana de forma consecutiva a costa de un Craiova que soñó con la sorpresa hasta el descanso del partido.