Tras su marcha el pasado verano del Athletic Club, Álex Remiro se veía las caras con los leones vistiendo la camiseta de la Real Sociedad. Un cambio de aires que no a todo el mundo sentó bien, pero que él lleva con naturalidad.
"El tener minutos, ver que tiene ocasiones el rival y no nos meten gol... Estoy disfrutando del día a día y de los partidos", comentó el jugador en una entrevista concedida a 'AS'.
El fin de semana pasado vivió su primer debir vasco y se llevó los tres puntos: "Para mí no era el partido más importante de mi vida. Sí fue especial, porque vengo de ahí".
El joven cancerbero está a tres partidos de poder levantar la Copa del Rey, pero pide calma: "Estamos centrados solo en el Mirandés y pedimos que la grada esté como en el derbi vasco para que todo salga bien".
Sin embargo, aseguró que no hay que fiarse. "El Sevilla y el Villarreal nos ganaron, y el Celta nos puso complicadas las cosas... y a los tres ha eliminado el Mirandés. Así que eso lo dice todo", finalizó Remiro.