Hay jugadores que encajan mejor la retirada que otros. Y luego están los que tienen una personalidad frágil y explotan por su dura carrera tras la retirada.
En el grupo de los últimos estaría Craig Bellamy, histórico de Liverpool, Newcastle o Norwich y que disputó casi 300 partidos en la Premier League.
El galés, retirado en 2014, confesó que lleva tres años con deepresiones. "No puedo esquivar eso, soy un hombre que tiene tendencia a la depresión", reveló a 'Sky Sports'.
"Llevo medicándome tres años y casi no he hablado de ello, pero he pasado de un extremo a otro con mucha facilidad. Las lesiones no ayudaron, claro. Me sentía torturado. No quería esprintar porque me dolía demasiado", dijo el ex futbolista, que llegó a ser el más rápido de la Premier League en su momento.
"Durante mi carrera, la depresión fue incluso peor que tras la retirada. Llegaba a casa y no hablaba durante tres días. Tenía mujer y una joven familia y no quería hablar. Me encerraba en mi habitación y me metía en la cama durante días", siguió contando el histórico de fútbol galés.
El ex delantero rememoró su paso por el Newcastle, que pagó mucho dinero por él, y cómo no pudo ir al Manchester United, club que estaba muy interesado en su fichaje: "Tenía problemas de tendinitis en ambas rodillas y quería que mi carrera acabase. El Newcastle había pagado mucho por mí y no podía justificarlo. Recuerdo que el Manchester United me quería, pero sabía que no podía ir allí en ese momento. No podía competir con los jugadores que había en el club".