El Eibar consigue tres puntos que bien valen un sufrimiento

Lo pasó mal el Eibar para tumbar al colista de Segunda División, porque el Alcorcón dio la cara, y de no ser por Yoel, el resultado podría haber sido distinto para los intereses del conjunto que dirige Fran Fernández.

Pero el cuadro armero hizo lo que debía, ganar, lo cual en una categoría como esta Segunda División no es poca cosa. Y en parte lo consiguió por lo bien que encarriló el encuentro durante la primera media hora en Ipurua.

En el minuto 12 llegó el 1-0, obra de un ex alfarero como Stoichkov, que aprovechó un excelente centro de Tejero y la dejada de otro compañero para rematar en el corazón del área. Demasiado fácil entre una defensa madrileña que hizo agua.

Mostró descaro el Alcorcón en ataque durante los 90 minutos. De hecho, nada más recibir ese varapalo, Zarfino y Lucho Vega gozaron de las primeras grandes ocasiones de gol para el cuadro madrileño. Sin embargo, el 'knockout' posterior de los locales fue espectacular.

Cumplidos los primeros 20 minutos, Corpas se internó por la derecha y, en una jugada similar a la del primer tanto, Expósito terminó finiquitando un gran servicio del ex del Almería, siempre incisivo por una banda derecha que es un puñal.

No se rindió el Alcorcón, que forzó a Yoel a realizar varias intervenciones de mucho mérito. En el 40', gol anulado a Marc Gual por falta previa de Lucho, pero el premio a la insistencia llegó a los dos minutos, cuando Zarfino remachó un remate al poste de Aguilera.

La sorpresa llegó con el empate en el 45', justo antes del descanso, pero fue anulado por un fuera de juego posicional que parece claro en una excelente acción individual de Marc Gual, que recibió en la banda derecha y se adentró para acabar firmando un zurdazo sensacional a la escuadra.

Con el 2-1 en el segundo tiempo, al Alcorcón le faltó esa fuerza y las ganas de remontar que mostró antes del intermedio. La gasolina duró lo que duró y el Eibar supo contemporizar y jugar con el marcador a favor para acabar llevándose el triunfo.

Por el camino hasta el final, Fernando Llorente salió al campo y Xisco Jiménez deleitó a los espectadores con un majestuoso control en un balón llovido. No peligraría en los últimos minutos el triunfo para el Eibar ante un Alcorcón con demasiado corazón, pero poca cabeza.