Los de Mendilibar saltaron al césped de Atxabalpe con un once en el que formaban jugadores que tal vez no arranquen la temporada de azulgrana, como Bebé, Martínez o Nano, pero todos querían demostrar al de Zaldibar que tienen un sitio en la plantilla azulgrana.
Así se llegó al descanso con una renta de dos goles a cero, tantos logrados por Kike García y Nano Mesa.
En la reanudación, Orellana asistió a Charles para anotar el tercer gol del partido para un Eibar que no tenía demasiadas dificultades para crear peligro.
Escalante se encargó de cerrar la goleada para un Eibar que tendrá el viernes su primera prueba importante frente a la Real Sociedad en Ipurua.
Primer test para un equipo que ya parece bastante hecho, con las carencias clásicas de la pretemporada.