Escribá le ha dado cosas interesantes a este Elche. Especialmente, la capacidad de responder cuando un partido se pone cuesta arriba. Es un equipo con variantes y ante el Betis las ha puesto encima de la mesa para lograr un punto de oro.
Tanto el Elche como el Betis pudieron ganar en este choque dominical. El conjunto de Pellegrini se marcha con sabor agridulce por un partido que tenía en su mano y en el que, finalmente, se tiene que conformar con un empate implacable en una segunda mitad muy equilibrada.
Cuando más brilló el Betis en el Martínez Valero fue al principio del encuentro. Unos minutos en los que el equipo andaluz conectó bastante bien en zona de ataque, apoyándose en las bandas de Emerson y Álex Moreno, dos auténticos puñales.
En una buena internada del carrilero brasileño llegó el gol que adelantó al Betis en tierras ilicitanas. La pelota quedó rechazada y Borja Iglesias, que buscaba el remate, fue derribado con contundencia por Verdú y se estrelló con el poste, lo que luego le provocaría ser sustituido.
Lo anotó el 'Panda' con potencia en el 14'. Directo a la escuadra e inalcanzable para Édgar. Comenzó con buen pie el Betis, que pudo doblar su ventaja en el marcador durante los siguientes minutos, sobre todo en una de Canales en el área que perdonó con un disparo demasiado cruzado.
A partir de la primera media hora, la imagen del Elche fue completamente distinta. Gracias al descaro de Mojica y Palacios, la novedad por la derecha, el cuadro franjiverde apretó y embotelló por momentos al Betis, aunque el tanto del empate llegaría en una jugada totalmente aislada.
Y lo fue por la buena jugada del gaditano Tete Morente, que dejó sentados a dos defensores béticos y puso un centro impecable para que Pere Milla marcara en boca de gol. Un empate que levantó al Elche y que hundió moralmente al Betis, con Juanmi tras la lesión del 'Panda'.
Tras el descanso, los ataques se intimidaron bastante. Había enfrente un rival la mar de serio que podía ponerles en un aprieto con solo una jugada. Por eso mismo, Elche y Betis saborearon antes de lo normal el empate que mandaba en el Martínez Valero.
El Elche se acercó a la remontada con algunos centros al área, pero Carrillo ni los cambios encontraron la pólvora necesaria. Pellegrini dio otro aire a los suyos con Joaquín y Loren. El gaditano puso buenos balones que rozaron la sorpresa y Juanmi la tuvo en una contra para el 1-2.
Al final, reparto de puntos justo que acerca a la salvación al Elche, en continua mejoría desde el regreso de Fran Escribá a su banquillo. El Betis se queda con un mal sabor de boca después de dejar escapar dos puntos clave por Europa. La próxima será.