Después del inicio de sus carreras deportivas, ambos llegaron a España con la posibilidad de poder triunfar en el fútbol europeo. Sin embargo, ambos no consiguieron mantener el nivel y la regularidad necesaria para hacerlo.
Robinho llegó muy joven al Real Madrid, a los 21 años, después de destacar en Santos, donde consiguió firmar un papel espectacular pese a su temprana edad. Tres temporadas buenas antes de marcharse al Manchester City.
Por su parte, Douglas llegó al Barcelona con 24 años, hace sólo cuatro temporadas. Disputó únicamente ocho partidos y se marchó cedido en primera instancia al Sporting, para posteriormente acabar en el Benfica.
Ahora, el camino de ambos les ha llevado a Turquía. Concretamente al Sivasspor, donde ambos esperan volver a sentirse importantes en el fútbol europeo. Una nueva aventura para los dos brasileños.