Confirmación de líder y desastre 'kiriko' en el RCDE Stadium. El Espanyol derrotó por 4-0 al Fuenlabrada en su cita de la jornada 32 de la Liga. La contienda estuvo marcada por una tempranera expulsión de Nteka y por un equipo visitante que, francamente, no estuvo nada bien.
A los 17 minutos de partido y con VAR incluido, Randy vio la roja directa por cortar con el brazo en línea de gol un remate de cabeza que ya había superado a Rosic. El colegiado consultó la repetición en el monitor y, además de señalar el punto fatídico, le expulsó por evitar una ocasión manifiesta de gol: la pelota iba a entrar.
Raúl de Tomás transformó la pena máxima y puso así cuesta abajo el resto del encuentro para los suyos. Tranquilos, con calma, apoyados en una superioridad que ya exhibían antes de la expulsión y que cuidaron e hicieron evidente tras la misma, se lo pasaron bien mientras iban poniendo bonito el marcador en su favor con más tantos.
El protagonismo recayó en los anotadores, pero uno de los efectivos que más brilló fue Sergi Darder. Aprovechando, por supuesto, que el Fuenla estaba con uno menos, dominó la zona de tres cuartos de campo. Hizo lo que quiso, cuando quiso y como quiso, ya fuera repartiendo balones a las bandas, filtrándolos por dentro y vistiéndose él mismo de regateador.
No fue él, eso sí, sino David López quien trazó un pase en profundidad rompelíneas para que Embarba hiciera el 2-0. El 3-0 corrió de la cuenta de Pulido, que despejó a su propia portería un pase de Darder en el área -se había ido de cuatro el '10' en esta jugada- y el 4-0 lo firmó Raúl de Tomás en el ecuador de la segunda parte.
Este último tanto fue el mejor resumen del partido de los 'kirikos'. Rosic, Diéguez y Pulido no se entendieron al ir a despejar un centro, acabaron en el suelo y RDT remató mientras los tres seguían ahí. Fue el colofón a una actuación defensiva bastante débil que la roja a Nteka condicionó. En lo ofensivo, nadie dio apenas trabajo a Diego López y sus zagueros.
Los de Oltra deben sacar pecho y levantar la cabeza porque están en una posición muy meritoria en la tabla, pero lo cierto es que su visita a Barcelona fue un desastre. Un desastre en el que surfeó y se lo pasó bien el Espanyol, líder de plata una jornada más.