El Extremadura lleva varias jornadas haciendo cábalas y midiendo con lupa los puntos que quedan para poder lograr la salvación. Desde que acabó la primera vuelta, los extremeños pasan por un duro bache.
Ya van nueve jornadas de la segunda mitad de la competición y el Extremadura sólo ha conseguido anotar cinco goles. Durante los primeros 21 encuentros de la campaña, alcanzaron las 28 dianas.
Uno de los principales problemas fue la marcha de Enric Gallego. El ariete dio el salto a Primera División y, desde entonces, el club entró en sequía de cara a puerta.
La próxima jornada no jugarán, ya que les tocaría hacerlo ante Reus, que quedó fuera de la competición. Los cambios de entrenadores no han ayudado a mejorar la situación, pero ahora Manuel Mosquera tendrá dos semanas para preparar el choque.