Armani es uno de los grandes porteros del continente, pero no encuentra la forma de tomarle la medida al Mundial de Clubes. Y es que el guardameta se quedó con la miel en los labios tras perder ante el Al Ain.
El de Casilda no pudo acceder a la gran final del torneo después de verse obligado a hincar la rodilla desde el punto fatídico. Los emiratíes fueron más eficaces en la tanda de penaltis y dieron la sorpresa con mayúsculas.
Pero esto no es nada nuevo para Armani. Y es que la suerte no le ha acompañado cuando ha jugado el Mundialito. Ha disputado tres encuentros y el balance no puede ser más que demoledor: siete goles encajados.
En 2016, el portero argentino, en las filas de Atlético Nacional, cayó en semifinales ante el Kashima (0-3) y pagó caro el mal encuentro de su equipo. En la lucha por el tercer y cuarto puesto, el 'verdolaga' empató a dos ante el América.
Dos años después, ya como campeón de la Libertadores con River, Armani volvió al Mundialito para quitarse esa 'espina' clavada, pero no pudo cumplir con su propósito. De nuevo, el de Casilda fue eliminado en 'semis' y por un equipo asiático.
El gafe de Armani en el Mundialito. Eliminado con Atlético Nacional (vs Kashima en 2016). Hoy, repite batacazo ante el Al Ain. Ha encajado 7 goles en tres partidos pic.twitter.com/YHMmMUWjj5
— Enrique Salvatierra (@kikesalvatierra) 18 de diciembre de 2018