Criscito anotó un tanto de falta que habría firmado el propio Leo Messi. Resultó ser el 2-1 definitivo. Gol importante a domicilio para abrir la serie.
El defensa se sacó de la chistera un suave golpeo que se coló en la escuadra derecha de la portería que defendía Gulácsi.
La sutileza del golpeo le añade un especial atractivo a un gol de los muchos que se marcaron en esta jornada de Europa League.
8 de marzo de 2018