Nada parece salir bien en el Haro Deportivo. Después de una campaña negativa en el aspecto deportivo, certificando su participación en la fase de permanencia en Segunda RFEF varias jornadas antes de concluir la primera fase, ahora deben pasar por el calvario de sufrir un brote de COVID-19 en su plantilla, el cual ya va por once positivos.
La semana pasada, el club riojano notificó hasta ocho casos positivos, por lo que se aplazaron cuatro partidos de la última jornada de primera fase a excepción del Tudelano-Calahorra, donde ninguno se jugaba nada. Ahora, tras las nuevas pruebas realizadas este lunes, se han sumado otras tres infecciones que hacen un total de once entre jugadores y cuerpo técnico.
Ahora, con once positivos y con la cuarentena obligatoria hasta sacar resultados negativos, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) deberá decidir si la última jornada se lleva a cabo, de qué forma y cuándo. Se manejan las opciones de suprimirla y clasificar por coeficiente o jugarla el miércoles 31 de marzo.