Creía tenerlo todo encarrilado el Bayern con el tanto de Goretzka en el minuto 12, pero el Heidenheim tenía mucho que decir. Sobre todo después de que Süle fuera expulsado en una acción tremendamente polémica.
Obviamente, el partido cambió. El Heidenheim olió sangre y comenzó a jugar con los nervios del campeón bávaro, que para colmo no pudo contar con Neuer en portería a causa de una lesión.
Su sustituto, Ulreich, no estuvo demasiado acertado en ninguno de los dos tantos. En el primero, en el minuto 27, Glatzel cabeceó en el segundo palo y Ulreich apenas se movió para cazar un balón que entró muy centrado.
En el 39', al borde del intermedio, Schnatterer consiguió un gol que difícilmente podrá olvidar y en el que Ulreich, recordado por su error en el Madrid-Bayern de la pasada Champions, reaccionó tarde.