El reglamento es claro: no se pueden encender elementos que expidan cualquier tipo de humareda. La Federación, a través de su presidente Noël Le Graët, ha alertado del problema.
"Le pido a la Liga, si no a la Federación, que se encargue de los asuntos de seguridad. No aceptaré un solo problema de humo. Es algo que solo existe aquí, partidos que comienzan diez minutos tarde por el humo. No puede ser", señaló.
En el estadio del PSG, por ejemplo, son fáciles de ver el encendido de bengalas. Los cifras afectan a la totalidad de clubes que jugaron primera y segunda categoría en Francia la temporada pasada. Un informe señala que se registraron 309 humaredas después de 2.246 usos de este tipo de elementos inflamables.
Este informe, publicado por 'AS', revela el aumento de un 60% de casos en comparación a la campaña anterior. El Olympique de Marsella arrastra multas que superan los 1,3 millones de euros, por ejemplo. De momento, no se pone coto a este problema entre los aficionados.