El Inter de Milán ya está en las semifinales de la Europa League tras haber pasado por encima de un Bayer que se emborrachó de balón, pero no de gol. La efectividad y la pegada es lo que cuentan en el fútbol y de eso no le faltó al equipo de Conte.
Los siete disparos a puerta fueron más determinantes que el 64% de posesión de un Bayer que pone fin a la temporada y podría decir adiós a una de sus mejores estrellas. Este podría haber sido el último duelo de Kai Havertz, pues está a pocos pasos del Chelsea.
Barella fue el primero en abrir la lata en una media hora de locura. Al del Inter le llegó un balón rechazado y con el exterior de la bota la alojó dentro de la red de Hradecky.
Eentre un taconazo de Lautaro Martínez, el segundo no tardó demasiado en llegar. Lukaku ganó la batalla a Tapsoba y a la media vuelta, en un ejercicio de físico y mucho cuerpo, batió al guardameta.
Tan solo tres minutos después, Havertz se metió entre dos rivales, Volland le devolvió la pared y la joven promesa firmó un remate a bocajarro para el 2-1. A partir de ahí, el VAR quiso tener su protagonismo.
El árbitro vio penalti por mano de Sinkgraven, pero la tecnología le chivó que el balón le golpeó en el hombro, así que Lukaku tuvo que recoger el esférico del punto de penalti, donde ya lo tenía colocado para buscar el tercero.
En la segunda parte dominó el Bayer y el Inter se limitó a aguantar el resultado. Lukaku se puso delante de un disparo de Gagliardini, aunque estaba en fuera de juego, y Alexis merodeó el gol en unos buenos minutos.
El chileno acabó jugando con un vendaje en el muslo por un pinchazo porque Antonio Conte ya había gastado las tres ventanas posibles para hacer sustituciones. El VAR escribió otra página del partido para corregir de nuevo al mandamás.
Tapsoba derribó a Eriksen, pero el balón golpeó en la mano de Barella, que estaba en el suelo, de modo que lo que se pitó finalmente fue mano en ataque. Tras seis minutos, el Bayer no logró empatar y el Inter ya está en semifinales.
August 10, 2020