El Leganés destapa el tarro de los goles
El Leganés únicamente llevaba 6 goles en 10 partidos en Primera División. En uno más, ante el Celta, marcó un 50% más, tres tantos que le permiten salir del descenso, dejar atrás a cuatro equipos y dejar en problemas al equipo de Jonatan Giráldez.
Después de una primera mitad con muy pocas ocasiones, con Guaita como espectador de lujo y con Dmitrovic con poco trabajo, el fútbol desató sus hostilidades -en el buen sentido de la palabra- en la segunda mitad.
El Celta comenzó a generar con mucho peligro nada más pasar por vestuarios. Sin embargo, el trabajo que hacían Borja Iglesias, Aspas y Bamba no se concretaban en jugadas de excesivo peligro. Dos llegadas desde la frontal se tradujeron en disparos que, eso sí, no encontraron la portería del Leganés.
Necesitado de victorias -la única que tenía correspondía a la segunda jornada-, el conjunto 'pepinero' comenzó a jugar con la entrada al campo de Miguel de la Fuente. El delantero, que sustituyó a un Haller aún ausente, cambió la cara de su equipo.
De sus botas nació el primero de los goles, obra de Diego García para estrenarse en la élite, y el segundo, tanto de Brasanac tras una gran jugada. El tercero fue marcado por Sergio González, suplente más de 500 días después pero aprovechando igualmente sus minutos.
Destapó su tarro de los goles con una jugada colectiva. Miguel de la Fuente robó, Raba cedió y Diego García batió a contrapié a un Guaita al que le pilló frío después de no tener que trabajar en ningún momento.
Noqueado, el Celta intentó reaccionar con unos cambios que no surtieron efecto más allá de provocar alguna amarilla al Leganés. Lo que no esperaba el conjunto celeste, hoy de naranja, era encontrarse con otro robo de De la Fuente y una ruleta de Brasanac para poner el 2-0.
Con la fiesta instaurada ya en Butarque, Sergio González apareció en las inmediaciones del área de Guaita para firmar la sentencia de cabeza, el tercer gol del Leganés y su primer en la élite del fútbol español.