El Real Madrid demostró ante la Juventus por qué es el rey indiscutible de la Champions League. Los blancos golearon al equipo 'bianconero' en 90 minutos de fantasía e incluso metieron 3 goles en 45 minutos.
Fueron el punto opuesto a un Barcelona impotente, que fue incapaz de hincar el diente a la Juventus en dos partidos.
Pese a las ocasiones de Iniesta y Messi en la ida y al dominio absoluto en el Camp Nou, el Barcelona fue incapaz de marcar un solo tanto a los de Allegri, pero el Real Madrid destrozó ese registro de los de Turín en un abrir y cerrar de ojos.
Una muestra más de la diferencia que hay entre el equipo blanco y el azulgrana hoy en día. En agosto los de Valverde tendrán la oportunidad de empezar a cambiar la racha en la Supercopa.