El Madrid-Valencia en clave 'merengue'

1. Mayor solidez del bloque

El Real Madrid mejora como equipo, va mostrando detalles del trabajo de Santiago Solari. En diferentes circunstancias del partido fue un bloque en todo momento. Para presionar arriba en el primer acto, robar en campo contrario y ser eléctrico con una clara mejoría física; y juntando líneas en el segundo, estando unido cuando el Valencia reaccionó, juntando líneas tras recular metros y lanzando contragolpes hasta que acertase con la sentencia. En ningún momento se partió como hacía en muchos partidos. Defendieron todos, como se mostró en los robos de Benzema en carreras defensivas, y atacaron unidos con presencia clave de los laterales en campo contrario.

2. Los jóvenes piden paso

Es la mejor conclusión que sacó Solari de su sexto triunfo en siete partidos dirigidos. Cuando ha dado paso a la segunda unidad, los más jóvenes le han respondido. Especialmente llamativa la aportación de Marcos Llorente, de la grada a tomar el mando en el medio centro dejando dos partidos sobrios ante dos rivales de peso como Roma y Valencia. Cómodo en sus funciones dirigió y dejó una rapidez en un contragolpe en el tramo final que exhibe su preparación física con el trabajo extra que hace fuera del club. Sergio Reguilón se consagra como el sustituto de Marcelo y consiguió que no se añorase al brasileño y los minutos que recibió Fede Valverde de nuevo mostró gran personalidad en un momento decisivo del encuentro, aumentando el físico para que el duelo cayese de lado madridista.

3. La seguridad de Courtois

Desde la portería, dejándola a cero en sus partidos, el Real Madrid crece obligado y Courtois lo ha conseguido en los dos últimos partidos con una imagen repleta de firmeza. Apagado el debate de la portería gracias a la decisión de Solari de acabar con la alternancia en función de la competición y relegar a papel de suplente a Keylor Navas, la confianza que ha recibido el guardameta belga le ha impulsado al regreso a su verdadera identidad. Transmite mayor seguridad y muestra el nivel que le ha llevado al Real Madrid. Ante el Valencia apareció cuando debía para mostrar que había un muro que no superarían.

4. Meritorio Isco

Recibió el perdón de Solari con matices, jugando los últimos diez minutos pero estando en la banda 25 calentando antes de salir y siendo el tercer cambio. Por delante suyo entraron Marco Asensio y Fede Valverde. Quedarse en la grada en un partido clave en Roma puso el foco sobre él y la afición madridista debía pronunciarse. Optó por el mimo, con amplia mayoría de aplausos cuando saltó al césped. Isco, que se debe ganar ahora en entrenamientos y los pocos minutos de los que dispone un sitio, lanzó la jugada del 2-0 de la sentencia, pidió el balón siempre y jugó ajeno a la polémica. Queda relegado a jugar ante el Melilla en Copa del Rey esos partidos en los que antes era reservado y ahora está obligado a brillar para merecer más.

5. La semana goleadora de Lucas Vázquez

Nunca se ha caracterizado por su pegada y llevaba ocho meses sin hacer un tanto, pero en la misma semana ha firmado dos importantes que son su respuesta a la confianza de Solari. El único partido que ha perdido el técnico argentino desde su llegada fue en el que dejó sin minutos a Lucas Vázquez, una decisión que extrañó por su frescura y el cansancio que mostraron internacionales que llegaban de semanas de selecciones. Lucas se gustó ante el Valencia, rebosante de confianza cada vez que intervino y su buena actuación la rubricó con el remate del segundo gol a pase de un Benzema que ejerce de líder. Como el pasado curso, la temporada de Lucas va de menos a más hasta que acaba convirtiéndose en titular.