El Mallorca y el fútbol balear mostraron su solidaridad

Con la presencia en el palco de honor de la presidenta del Govern Balear, Francina Armengol, el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, autoridades locales y personalidades de distinto ámbito, se jugaron los noventa minutos más solidarios de la historia del fútbol balear, donde el resultado fue lo de menos.
También presenciaron el partido la delegada de Gobierno, Rosario Sánchez, el comandante general de Baleares Juan Cifuentes, el presidente de la territorial balear del fútbol, Miquel Bestard, y el consejero delegado del Mallorca, Maheta Molango.
Los cinco euros que cada uno de los aficionados pagó por estar presentes en la noche solidaria serán destinados de forma íntegra a paliar, en parte, los efectos de una tragedia cuyos dramáticas consecuencias siguen vigentes en la memoria colectiva de los baleares.
Toda la sociedad ha contribuido de una manera u otra en las ayudas a los más necesitados.
El punto de inflexión fue la imagen del tenista mallorquín Rafael Nadal barriendo con una escoba el lodo en las calles de Sant Llorenç.
Esta noche otro miembro de la familia Nadal, Miguel Ángel, jugador del filial del Mallorca e hijo del ex futbolista internacional del Barcelona del mismo nombre, tuvo un protagonismo especial al jugar la última media hora
El fútbol español se ha sumado a la ola de solidaridad con Mallorca después de que Rubiales confirmara que la Federación que preside destinará 100.000 euros a los afectados.
Además, obsequió a la territorial balear cromos con las firmas de los jugadores de la Selección Española para que este organismo recaude dinero con ellos.
Los 4.000 aficionados que esta noche acudieron a Son Moix disfrutaron con la exhibición de "sus futbolistas" , dirigidos por el técnico Josep Lluís Martí, ante el primer equipo del Mallorca, con Vicente Moreno en el banquillo.
Seis de ellos militan en equipos de Primera: Miguel Ángel Moyà (Real Sociedad), Ximo Navarro ( Alavés), Pedro Bigas ( Eibar ), Sergi Darder (Espanyol), Lluìs Sastre (Huesca) y Sergio Enrich (Eibar).
Asensio había anunciado públicamente que quería estar en Palma en esta noche tan especial, pero no pudo venir al estar concentrado con la Selección Española que dirige Luis Enrique para los partidos ante Croacia y Bosnia.
No obstante, envió un mensaje por vídeo para reiterar su apoyo a los damnificados de la torrentada.
Rubiales explicó que el jugador internacional le había solicitado que le disculpara, en su nombre, ante los aficionados.
También se sumaron jugadores de Segunda A, Segunda B y Tercera de todas las islas para contribuir a un espectáculo en el que tanto el Mallorca como la Federación Balear de Fútbol se han volcado desde el principio.
Los aficionados de los municipios afectados por la riada, Manacor, Sant Llorenç, Capdepera, Son Servera y Artá, acudieron al campo a bordo de algunos autocares gratuitos que la Federación de Transporte puso a disposición de todos ellos de manera gratuita.
La noche del fútbol solidario contó con la ayuda desinteresada de efectivos de las fuerzas y cuerpos de seguridad, vigilantes jurados, empresas privadas y decenas de personas que desempeñan distintas funciones en el estadio de Son Moix.
Fue un partido de 'guante blanco', a ratos jugado con mucha intensidad, que comenzó con un respetuoso minuto de silencio en memoria de las víctimas.
En el centro del campo se desplegó una pancarta con la leyenda: "Solidaris amb el Llevant de Mallorca", y unos niños exhibieron un cartel que rezaba: "Gràcies per la vostra ajuda, esforç i solidaritat".
Los organizadores esperaban una mayor asistencia de público, pero solo se llenó, en parte, la tribuna principal. El resto de las gradas estuvieron vacías.