Ricardinho, posiblemente el mejor jugador de la historia del fútbol sala mundial, ha marcado goles de todas las clases y colores. Muchos de ellos le han valido trofeos y campeonatos.
Pero su favorito, según confesó en una entrevista a 'AStv', fue uno que marcó durante su etapa en Japón, antes de unirse a las filas del Movistar Inter.
El portugués recibió el balón dentro del área, pero se encontraba de espaldas a la portería. Lejos de ponerse nervioso, levantó el cuero dando un salto y lo hizo pasar por en encima del portero.
18 de enero de 2015