A lo largo de los últimos años, especialmente desde que el FC Barcelona de Pep Guardiola dominara durante años el fútbol, la posesión pasó a considerarse algo casi sagrado. Los equipos debían tener la misma para que el gran público considerase que jugaba 'bien' y renunciar a ella era casi un sacrilegio.
A día de hoy, el balompié ha ido cambiando y el control del esférico, aunque lógicamente importante, ha ido perdiendo valor debido a la evolución hacia un juego más vertical y físico en la que se trata de golpear al rival lo más rápido posible. En las cinco grandes ligas de Europa hay varios equipos que bordan esto y uno de los más destacados es el Metz.
El conjunto de la región de la Lorena, actualmente en la Ligue 1, regresó hace una temporada a la élite del fútbol galo y, en una temporada marcada por el coronavirus, logró terminar en una destacable 15ª posición, pero este curso su rendimiento es sencillamente espectacular.
Pasadas ya 26 jornadas, el Metz ocupa la sexta posición de la tabla y pelea con el Lens por ser el primero de los mortales este año tras unos inalcanzables Lille, Lyon, PSG y Mónaco. Y lo hace siendo el mejor ejemplo de que la posesión no lo es todo en el fútbol.
Hasta el momento, el cuadro francés es el equipo que menos tiempo tiene el esférico en sus pies de la competición francesa. En concreto, la posesión media del Metz es del 43%. Un dato que le coloca el último en esta tabla, muy alejado de un PSG que alcanza una cifra del 63,9%.
El 81,6% de sus puntos, sin el balón
Sin embargo, el cuadro dirigido por Frédéric Antonetti saca mucho jugo al balón cuando lo tiene, algo que podemos apreciar con BeSoccer Pro al analizar la repercusión goleadora de la posesión en los diferentes equipos de la Ligue 1.
Con solo un 43% de posesión, el Metz tiene una diferencia de goles de +6 (31 a favor, 25 en contra). Un dato bestial que cobra todavía más importancia al compararlo con los dos equipos que, tras él, menos balón tienen a lo largo de los encuentros. Estos son Lorient y Nimes, con el 43,2% y el 44%, respectivamente.
Pues bien, mientras el primero acumula un balance realizador de -19 (31 a favor, 50 en contra), el segundo dispara este registro hasta un -26 (25 a favor, 51 en contra). Unos números que demuestran lo bien que defiende y lo cómodo que se encuentra sin balón un Metz que, a nivel de resultados en función de la posesión, está en la élite continental.
Al analizar al detalle los duelos del equipo francés, podemos comprobar que el Metz ha logrado 31 de sus 38 puntos (el 81,6%) en aquellos duelos en los que el rival tuvo más tiempo el esférico en su poder. Un registro solo superado por un West Ham que, en la Premier, ha sumado 35 de sus 45 puntos tras perder la batalla por la posesión. Y es que tener el balón no es sinónimo de éxito.