Una vez más, el coraje pudo con los millones. El Manchester United, plagado de bajas, la última, la de De Gea calentando, viajaba a Dinamarca para medirse al campeón del país. Y lo que debería haber sido un partido fácil se convirtió en una pesadilla para los pupilos de Van Gaal.
Pero con la calidad que tiene la plantilla, no hay excusas que valgan. Llegaba de perder ante el Sunderland, el penúltimo clasificado de la Premier League, y ahora va la 'cenicienta' de la eliminatoria y también le gana.
Comenzó teniendo sus ocasiones el Manchester United. Memphis, Martial y Lingard lideraban el ataque, ante la ausencia de Rooney, pero no dieron la talla.
Tuvieron ocasiones al comienzo, pero el Midtjylland no se amilanó, e hizo sudar a Romero, que sacó una mano espectacular tras un cabezazo picado a su poste izquierdo.
Entonces, el United marcó. Mediaba la primera mitad cuando Lingard puso un centro al área, donde esperaba Memphis... Pero éste se resbaló y desde el suelo, de mala manera, se recompuso y acertó a meter el balón en la portería rival.
Pero la alegría no le duró mucho al equipo de Van Gaal. Al filo del descanso Sisto, en jugada individual, anotaba el primero aprovechando un fallo garrafal de Carrick.
Tras el intermedio, la misma historia. Apretó el United, pero esta vez no se encontró con el gol. Lingard estrelló un disparo en el travesaño en la ocasión más clara de los 'Red Devils' en la segunda mitad.
En esas llegó el segundo gol danés. Onuachu se hizo un lío en la frontal, perdió el balón pero nadie fue a recuperarlo, y optó por chutar a puerta, marcando gol.
Los 71 días sin competir del Midtjylland no se han notado ante un decepcionante Manchester United. Van Gaal sorprenderá a todos si se sienta en el banquillo la próxima jornada.