Han tenido que pasar tres meses para ver de nuevo perder a la Real Sociedad. El cuadro donostiarra no hizo un partido demasiado completo y acabó pagando una primera parte bastante mala en todos los sentidos.
El único que hizo intentos por contrarrestar el juego del Mónaco fue un Isak que metió su golito, pero que luego lo tuvieron que quitar porque acabó bastante tocado. El sueco es capital en su equipo y en los instantes finales notaron su baja sus compañeros.
Al final, el Mónaco logró sacar tajada de los dos tantos que anotó en la primera parte. Volland y Fofana llevaron en volandas al cuadro del Principado a octavos de final, mientras que la Real se jugará el pase a la siguiente ronda en la última jornada frente al PSV.
A pesar de ofrecer una imagen bastante discreta en la Ligue 1, el equipo de Niko Kovac volvió a transformarse en Europa y ofreció una buena cara. Después de unos minutos de tanteo tras el pitido inicial, el duelo se volvió un ida y vuelta y ahí salieron ganando.
En el 28', Volland firmó el 1-0 en el 28' tras aprovecharse de una gran acción combinativa entre Ben Yedder y Golovin. El atacante ruso atacó por la derecha, cedió al corazón del área y el germano metió la punta de la bota para marcar.
Rápidamente, Isak, en uno de los primeros acercamientos donostiarras, se gustó ante Nübel con una picadita sensacional. El pase de Januzaj al espacio fue escandaloso. 1-1 y vuelta a empezar. Sin embargo, el marcador volvió a moverse.
En el minuto 38, Fofana aprovechó la prolongación de Jean Lucas en una acción a balón parado y remató de cabeza a placer para poner de nuevo en ventaja a los locales. Mazazo para los de Imanol, que ya no pudieron hacer nada para voltearlo.
Tras la reanudación, Isak volvió a mostrar sus cartas y estuvo cerca de hacer el empate en el 60'. Gran pase de Mikel Merino y el sueco se quedó a centímetros del gol tras tocar lo justo en defensor del Mónaco.
Las entradas de Barrenetxea y Gorosabel le dieron algo más de actividad a un equipo que fue de menos a más. El primero de ellos firmó varias acciones a destacar, pero fueron insuficientes para el conjunto 'txuri urdin'.
Fofana la lío ya casi al final y le dio un halo de esperanza a los donostiarras, aunque no sirvió de mucho. Oyarzabal tuvo una buena ocasión en el 93', pero su remate con la pierna izquierda no encontró portería. No tuvo su noche el '10'.
El Mónaco amarró la victoria, la clasificación a octavos y obliga a la Real a jugársela en casa ante el PSV.