Los 0-0 no son siempre peñazos incomibles. Nápoles y Espanyol se quedaron sin marcar en un amistoso que, sin embargo, tuvo buen ritmo y grandes ocasiones. En el 9', Lecomte ya empezó a trabajar a destajo. Evitó el gol de Osimhen con una parada más efectiva que académica.
De nuevo, el guardameta se midió al nigeriano y le sacó un centro-chut que se envenenaba con una buena parada que no sería la última del primer tiempo. Con el pie izquierdo, el portero 'perico' rechazó un disparo peligroso de Kvaratskhelia, una de las caras nuevas de los 'partenopei'.
Tras el descanso, y después de la vergonzosa escena de Aurelio de Laurentiis en el césped recriminando ciertas decisiones al árbitro, el Espanyol se envalentonó. Tuvo un par de claras ocasiones que Contini, quien reemplazó a Meret, se encargaría de neutralizar.
Antes de que se cumplise la hora de juego, el guardameta del Nápoles firmó una gran acción para dejar a Joselu con la miel en los labios. Impidió su gol con una intervención sobre la misma línea de gol. Respondió el Nápoles con un zapatazo desviado y un remate posterior de Osimhen, muy activo, pero fueron los catalanes, con mejor imagen en el segundo tiempo, los que rozaron la victoria. En el 73', Contini salvó el 0-1 al repeler una volea de Luca en la última acción con peligro del choque.