Castigo del otro Inzaghi a Pirlo por descartar a Cristiano

Otro encuentro lejos de Turín, otro encuentro en el que la Juve vuelve con un punto que sabe a derrota. La última vez fue ante el equipo de Simone Inzaghi, y esta vez ha sido ante el Benevento del hermano de este, Filippo.

La Juventus despidió a Sarri y puso en su lugar a Andrea Pirlo, en la ya clásica apuesta por el hombre de la casa. Una apuesta que, por el momento, sigue sin funcionar al 100%.

La 'Vecchia Signora' se está desangrado a domicilio, independientemente del rival. Se dejó puntos en el Olímpico de Roma, ante la Lazio, y lo ha vuelto a hacer, dos semanas más tarde, ante el Benevento.

¿Qué tienen en común estos dos traspiés? Pues por un lado, el resultado. En ambos el marcador mostró un 1-1 tras el 90'. Por otro, el hecho de que la Juve marcó primero (Cristiano en Roma, Morata ante el Benevento).

También ambos terminaron más allá del tiempo reglamentario y con polémica final. Y, también, que los dos rivales están entrenados por los hermanos Inzaghi. Así, 'Pippo', como hiciera Simone dos semanas antes, amargó a la Juve.

Y eso que, como en Roma, los de Pirlo dieron el primer golpe, al convertir Morata en gol un sensacional pase de Chiesa. Un tanto que hizo creer a la Juve demasiado pronto que el partido estaba resuelto.

Nada más lejos de la realidad. El Benevento puso en más de un apuro a su rival, hasta el punto de tenerle en el alargue del primer tiempo encerrado en su área, pidiendo el descanso.

Salvó Szczesny lo que era un gol seguro, pero a continuación el portero polaco hizo la estatua ante el tiro que supuso el emapte a uno, obra de Letizia.

La Juventus buscó el triunfo en la segunda parte, y el Benevento jugó a destruir, a desquiciar a su rival. Aguantó sus embestidas con uñas y dientes y acabó sacándole de quicio.

El encuentro se alargó hasta el 97', y como en Roma, la Juve terminó fuera de sí. En esta ocasióno no hubo un Caicedo que privase a los turineses de la victoria, hubo un Benevento que le negó el gol del triunfo.

Acabó la Juve pidiendo de todo, menos la hora, al colegiado. En especial un Morata que, tras el pitido final, enloqueció y, fuera de sí, bramó algo al árbitro, algo que le costó la roja directa y su ausencia segura del derbi de Turín de la semana próxima.

Con este punto, la Juve suma 17, y se coloca a tres de un Milan que está pendente de jugar su partido de esta jornada, ante la Fiorentina. El Benevento acumula 10 puntos, y se sitúa en una cómoda duodécima posición.