El Papu Gómez es un pilar fundamental en el Atalanta. En el club italiano acumula ya seis temporadas, pero su presente podría ser bien distinto si se hubiese cumplido lo que ha contado en el podcast del periodista Martín Reich 'Libres de humo'.
El mediapunta pudo ir al Atlético de Madrid y lo que ocurrió fue que una diferencia de cuatro millones de euros impidió que el Papu jugara a las órdenes de Diego Pablo Simeone.
"Estabamos en Argentina con Simeone y un día fuimos a almorzar. Ahí me dijo que volvía para la pretemporada y que me iba a pedir como refuerzo, pero el Atlético andaba mal económicamente y no se pudieron poner de acuerdo", contó.
El Papu aseguró que no lo pasó demasiado bien, sobre todo con la temporada que acabó haciendo el Atlético de Madrid en LaLiga: "Catania pedía diez millones de euros y ellos ofrecieron seis. No me vendieron y yo me quería morir porque encima después salieron campeones".
Al final, su destino fue el Metalist, club en el que duró una temporada hasta fichar por el Atalanta y comenzar un periodo de continuidad, tranquilidad y de peso en el club italiano.
"Yo me terminé yendo al Metalist porque vinieron los rusos y pusieron la plata. Ellos jugaban la Champions League y había varios argentinos, pero me tuve que terminar escapando de la guerra. Si no fuese por eso no estaría hoy en el Atalanta", acabó.