Si alguna vez alguien pregunta por qué el fútbol hipnotiza a tantas personas, ese encuentro entre Chelsea y Liverpool puede ser una perfecta entrega para convencer a cualquiera. Pura fantasía. Un manual de cómo llevar este deporte a su máximo esplendor, en todos los sentidos.
El Liverpool protagonizó su mítico 'chorreo' al Real Madrid en octavos, el Chelsea tumbó a la Juve. Dos equipos ingleses se medían en cuartos de final, pero fue el conjunto 'blue' el que golpeó primero. Un 1-3 en Anfield que resultaba difícil de levantar en un difícil escenario como Stamford Bridge.
Pero ese equipo 'red' se parecía al de ahora, al menos en la mentalidad. Nunca dejan de creer. Con tres losas a su espaldas, el Liverpool logró ponerse con un 0-2 momentáneo en Londres. Fábio Aurelio, de falta, sorprendió a Cech para el primero, mientras que Xabi Alonso no perdonaba desde el punto de penalti.
Un resultado que daba esperanzas a los de Rafa Benítez. Pero el Chelsea cambió el chip en la segunda mitad. Drogba recortó distancias antes de que Alex, con una falta espectacular, firmara el 2-2 en el marcador y Lampard, con su habitual presencia en el área, casi rompía el sueño 'red' con el 3-2 en el 76'.
Pero el Liverpool tenía, tiene y tendrá ese aura. La remontada 'blue' supuso una inyección de insulina en el corazón del cuadro de Anfield, que en dos minutos, con tantos de Lucas Leiva y Kuyt, se colocó con un 3-4 en el electrónico. Solo hacía falta un gol para confirmar su sueño y una eliminatoria para la posteridad. Pero apareció el 'villano' de esta bonita historia.
Lampard, ahora entrenador del primer equipo, anotó la última diana del encuentro para meter al Chelsea en las semifinales de la Liga de Campeones, donde se mediría al Barça. Semanas después, eran los azulgranas los que conquistaban Stamford Bridge con ese 'Iniestazo' que nunca se olvidará.
Entre Chelsea y Liverpool se han dado grandes partidos, pero ese quedará siempre en el recuerdo. De hecho, la web oficial de la UEFA lo catalogó como uno de los mejores duelos de la historia de la competición. Ahora, ambos equipos ingleses se miden en Premier, en Londres, en lo que se antoja como una revancha de aquella Supercopa de Europa que levantaron los pupilos de Jürgen Klopp este verano.