La jugada tiene tres protagonistas. El principal es Juancar, defensor del Pedroñeras, que trata de despejar en dos ocasiones, haciéndolo cada vez peor y acercando el balón a su propia área.
Adibe, el delantero del Conquense, fue el actor secundario. Siguió a Juancar y a sus infructuosos despejes hasta el área del Pedroñeras y, aunque estaba con molestias y no podía correr bien, según reveló 'La Mancha Media', se hizo con el balón en el área.
Y allí, ocurrió lo que hizo que la jugada fuera aún más absurda. Adibe cayó al sentir un contacto y el árbitró corrió hacia el área, indicando que no hubo infracción. No obstante, Cuevas, jugador del Pedroñeras, cogió el balón con las manos, creyendo que se señaló el penalti, por lo que al árbitro no le quedó otra opción más que señalar la pena máxima por mano.
Y, para ponerle la guinda al pastel, el penalti no acabó en gol. El meta del Pedroñeras despejó y en el rebote, un jugador del Conquense lo mandó fuera. Todo increíble.