El técnico francés sorprendió a todos convocando una rueda de prensa, dando pie a una vorágine de especulaciones que alimentaban los rumores sobre su salida del club tras lograr hacer historia en apenas dos años y medio.
En 875 días, Zinedine Zidane forjó su leyenda en el fútbol mundial, levantando tres Champions League consecutivas, una Liga, dos Mundialitos de Clubes, dos Supercopas de Europa y una Supercopa de España.
Sin embargo, a mediados de una campaña que se torció tras tumbar al Barcelona en pretemporada, el francés comenzó a abrir la puerta de salida, desmintiendo que su continuidad en el club estaba asegurada.
Pequeños comentarios enmascarados con su inquebrantable sonrisa que pasaban, en ocasiones, desapercibidos, quedaron eclipsados tras el exitoso final de curso que sólo Cristiano 'empañó' en Kiev.
Mientras se debatía si el Madrid de Zidane era equiparable al Baça de Guardiola, es imposible no apreciar las similitudes entre la espantada del técnico francés y la del catalán en 2012.
Años más tarde, ya en el Bayern de Múnich, Pep señaló la derrota ante el Chelsea como el justificante de su adiós: "Éramos mucho mejores que nuestros rivales, pero concedimos un gol innecesario en la vuelta y antes de que nos diéramos cuenta estábamos eliminados. Aquello supuso una gran derrota para mí. Me sentí como si no pudiera volver a levantar a mi equipo".
En este sentido, Guardiola enfatizó: "Si ya no puedes motivar a tus jugadores, como entrenador, sabes que ha llegado el momento de marcharse. Liderar un equipo exige toneladas de energía. En otras palabras, hay momentos en los que necesitas recargar las baterías".
Asimismo, el catalán subrayó su leyenda: "Fuimos increíblemente exitosos. Catorce títulos en sólo cuatro años, fue el mejor periodo en toda la historia del club. Pero eso puede ser también una losa. Encontré, progresivamente, dificultades para motivarme a mí mismo y al equipo. Con el Barcelona ya lo había ganado todo, tanto como jugador como entrenador. Y me di cuenta que al equipo le estaba resultando cada vez más difícil".
Dicho discurso de Guardiola tiene su eco en las palabras de Zidane para justificar su salida: "Este equipo necesita seguir ganando, necesita otro discurso, otra metodología de trabajo. Quiero mucho a este club, pero creo que hoy hay que cambiar y por esto he tomado esta decisión de no seguir el próximo año".
El propio Florentino Pérez, que acompañó al francés en sala de prensa, aceptó la decisión y espetó: "Estoy seguro de que volverá algún día al Real Madrid. Si Zidane necesita un descanso, se lo daremos".