El nuevo delantero del Real Madrid entró al campo en el minuto 68 y, como buen 'killer', remató el primer balón que tocó. Lo hizo con la cabeza y aprovechando un buen centro de Gareth Bale desde banda izquierda.
Su cabezazo, un tanto bombeado, acabó golpeando la cruceta izquierda de la portería de Masip. La bola se estrelló contra la madera y acabó marchándose fuera para disgusto del ex del Eintracht de Frankfurt.
El Bernabéu aplaudió con intensidad la acción, y no es para menos, pues la grada vio cómo Luka remató con muchísimo peligro el primer balón que tocó, rozando lo que le habría pedido Zidane en la banda: hacer gol.
24 de agosto de 2019