Portugal, como selección anfitriona, inauguró la competición en Oporto, en el estadio Do Dragao. Enfrente estaba la Selección de Grecia, la gran sorpresa de aquella Eurocopa y quizá de la historia reciente del fútbol.
Porque nadie daba un duro por el combinado heleno, y sin hacer un fútbol brillante no solo llegaron a la gran final, disputada tres semanas más tarde en el estadio Da Luz de Lisboa, sino que la ganó.
Pero volvamos a lo que nos atañe. Aquel 12 de junio de 2004, hace quince años, Portugal y Grecia inauguraban la Eurocopa. Karagounis, en el minuto 7, adelantó a los helenos, y en el 51' Basinas confirmaba la sorpresa haciendo el segundo.
Luiz Felipe Scolari había movido el banquillo al descanso, metiendo a Deco y a un jovencísimo Cristiano Ronaldo (19 años) por Simao y Rui Costa, y agotó sus cambios mediado el segundo tiempo, ya con el 0-2 en el marcador, quitando a Costinha para que Nuno Gomes metiera más mordiente al ataque luso.
Hubo que esperar al minuto 90 para que la hinchada local recuperase la esperanza. Luís Figo botó un córner desde la izquierda, y Cristiano se elevó más que nadie para marcar su primer gol como internacional absoluto.
12 de junio de 2019
Un gol que de poco sirvió, porque Grecia se acabó llevando el partido, pero que sirvió para que Cristiano Ronaldo se estrenase como goleador con la absoluta. En ese torneo marcaría otro, pero para la historia quedaron sus lágrimas tras caer en la final otra vez ante Grecia.
Quince años y 87 goles después, Cristiano Ronaldo es el máximo anotador (88 tantos) y el que más veces ha defendido la camiseta de su selección nacional (157). Y las que quedan.