Un primero de mayo de 2005 nacía al fútbol Leo Messi. Era su primer gol y su primera marca registrada. El equipo que comandaba Ronaldinho en el campo vería cómo surgía una estrella gracias a un buen gol de vaselina ante el Albacete.
El partido iba 1-0, Fran Rijkaard sustituyó a Samuel Eto'o por un tal Leo Messi y el argentino, melenudo y aún con acné, convertía el 2-0 de un partido en que Leo ya había conseguido otro gol, pero fue anulado. Así fue el primer gol del mejor jugador del mundo.