Comenzaron con brío los locales, ávidos de reinvidación ante una grada de Balaídos que lamenta la pérdida de identidad del equipo este inicio de temporada con el técnico argentino, que sumaba seis encuentros consecutivos sin ganar.
A lomos de Iago Aspas y Emre Mor, Antonio Mohamed planeó vencer a un Eibar que no logró establecerse sobre el césped de Vigo preso de sus dudas defensivas en torno a Asier Riesgo.
Apenas se había cumplido el minuto 5, cuando el 'Príncipe de las Bateas' cargó la pierna desde la esquina del área y dibujó una parábola excelsa que inutilizó la estirada del guardameta visitante.
Merced al paso del tiempo, el Celta se fue armando de argumentos para deshacerse de sus complejos de este arranque de curso y someter al conjundo de Mendilibar con más intensidad que juego.
Poco después de la primera media hora de juego, Iago Aspas calcó la parábola del primer tanto y firmó su doblete de golazos con otro golpeo imposible para Riesgo, caricaturizado en los dos tantos.
El delantero gallegó aprovechó un balón en profundidad de Brais Méndez para golopar al contragolpe y batir al portero 'armero' con una excelsa vaselina que puso en pie Balaídos.
Tras el paso por vestuarios, el Eibar subió una marcha y se avalanzó sobre el Celta con más necesidad que fe, sometiendo a los de Mohamed desde la reanudación hasta que cayó el 3-0.
Una elegante dejada de Emre Mor motivó la carrera de Hugo Mallo, que sirvió en bandeja a Brais Méndez para firmar el tercer tanto, que envió definitivamente a la lona el conjunto 'armero'.
Iago Aspas aprovechó un grosero error de Arbilla en la cesión a Asier Riesgo para driblar al portero y hacer su 'hat trick' particular, dándole tres puntos de sutura al Celta de Mohamed.